La selección francesa de baloncesto se impuso por 80-66 a una Lituania que se vio superada desde el segundo cuarto por los de Vincent Collet. Batum con 17 puntos y Diaw con 15 puntos, 6 rebotes y 4 asistencias fueron los mejores de los franceses. Francia consigue así su primer oro en un Eurobasket. Tony Parker fue elegido mejor jugador del torneo.
Tras días y días de competición, lejos queda ya el inicio de la competición el pasado 4 de septiembre, llegaba la gran final. Por un lado Lituania, con ganas de volver a coronarse campeona de Europa tras diez años (2003, cuando derrotó en Suecia a España en la final 93-84) y por el otro Francia con ganas de estrenarse y conseguir un oro que ya rozó hace dos años.
La final comenzaba bien para los lituanos. Su estrella y jugador franquicia, Linas Kleiza comenzaba enchufadísimo. Desde fuera, el aro parecía grande para el ex de Toronto Raptors que veía como su cuenta anotadora incrementaba cuando también conseguía anotar desde dentro a pesar de la oposición de un Boris Diaw que no sabía como pararle.
Kalnietis en la dirección se unía a la fiesta, y Parker, el mejor base europeo del mundo, no conseguía anotar hasta el minuto 8 de partido. Sin embargo hoy, al contrario que en las semifinales ante España, si que estaba presente Nicolas Batum que se iba hasta los 7 puntos y era la única producción ofensiva de una Francia que se iba al final del primer cuarto desquiciada con una falta de De Colo sobre Kalnietis y abajo en el marcador 22-19.
En el inicio del segundo cuarto Kleiza seguía anotando canastas de todos los colores, incluso en la cara de un gran defensor como Pietrus que quería ser el “antikleiza” pero que tampoco podía detener al de Kaunas que se iba a los 16 puntos en 15 minutos con un 86% de efectividad en el tiro.
Exhausto se iba al banco Kleiza y desde ese momento Lituania iba a notar su ausencia. Pietrus, a sus 32 años jugaba unos grandes minutos en defensa y en ataque, secundado por De Colo y Petro ponían a la selección francesa por delante 33-31.
A partir de aquí de nuevo aparecería Batum que con dos triples consecutivos iba a poner a los de Vincent Mollet 41-34, con un parcial de 16-3. Casualmente sin Parker en cancha los franceses se iban en el marcador y cerraban el segundo cuarto con un triplazo de Diot a 9 décimas de llegar a un descanso con 50-34 en el marcador y con una Lituania sin ideas en ataque y sufriendo una barbaridad en defensa.
Tras la reanudación los de Jonas Kazlauskas intentaron reaccionar con un inédito en los dos primeros cuartos Maciulis y con Kalnietis, el junto a Kleiza, jugador más destacado de Lituania a lo largo del torneo, sin embargo, Francia se encargaba de despejar todos los atisbos de reacción de los verdes con otras grandes acciones defensivas y con un gran Boris Diaw.
El de los Spurs se crecía y hacía daño tanto dentro como fuera de la zona yéndose a los 13 puntos y aumentando a 18 la ventaja de Francia en el marcador al final del tercer cuarto, 68-50. Los de la marsellesa acariciaban el Europeo.
Poca historia tuvo el último cuarto. Un Parker, discreto hasta ese momento, se venía arriba y buscaba aumentar sus números en busca de ese MVP del torneo, más que merecido. Al final el de San Antonio se iba a los 12 puntos.
Vincent Mollet daba minutos a todos sus jugadores para que disfrutaran de un triunfo (80-66) que les iba a elevar por primera vez a la gloria europea y a conseguir la primera medalla de oro en un Eurobasket de su historia.