Algo cambia en las grandes ciudades


Nueva York y Los Ángeles, los Knicks y los Lakers… ¿o no?

Las dos ciudades más pobladas de Estados Unidos siempre han tenido una franquicia NBA por bandera. Los New York Knicks llevan desde 1946 siendo el equipo NBA de la Gran Manzana por excelencia. En Los Ángeles fue en 1960 cuando se instalaron los Lakers, y desde entonces, han dominado la ciudad de las estrellas. Pero estos reinados… ¿tienen fin?

Fin quizás sea una palabra demasiado drástica, pero en ambas ciudades se está gestando algo que, cuanto menos, pondrá en cuestión la supremacía de las dos franquicias.


Llegan los “buenos” Clippers 

 

El vecino pobre de L.A. no está por la labor de seguir siéndolo. Desde que en 1984 se trasladasen los Clippers a la ciudad de California, la actuación de los de blanco y rojo siempre ha sido muy pobre. No han conseguido ningún título de Conferencia y solo han estado 6 ocasiones en los Play-Offs, siendo la segunda ronda lo más lejos que han llegado. Algo muy ridículo comparado con la trayectoria de sus vecinos. Pero el draft de 2009 fue la primera piedra para cambiar la historia de los Clippers. Ese año, utilizaban la primera elección para elegir a Mr.Mate, Blake Griffin. La segunda piedra llegó en 2011, con la adquisición de CP3. Uno de los mejores bases de la NBA aterrizaba en Los Ángeles, y no para vestir de púrpura y amarillo. Paul y Griffin han creado una combinación que con buenas piezas alrededor, han clasificado por dos temporadas consecutivas a los Clippers a los Play-Offs, cosa que solo había sucedido una vez, a principios de los 90. Además, la pasada temporada consiguieron hacerse con el título de campeón de su División, por primera vez en su historia, superando a sus vecinos. Para la próxima temporada el panorama se presenta aún mejor para el “vecino pobre”. A la dupla Paul-Griffin (y Crawford) se le suman este año dos metralletas exteriores como Dudley y Redick, un base reserva de lujo como es Darren Collison y el center Byron Mullens, una de las revelaciones de los Bobcats la pasada campaña. Con ese plantel los Clippers miran alto, y el anillo ya no es un sueño inalcanzable.

Sus vecinos tienen un panorama muy distinto. Si esta temporada no ha sido buena (cayendo en primera ronda de Play-Offs por un aplastante 4-0) la próxima campaña, con la marcha de Howard y la lesión de Bryant, que habrá que ver como vuelve, pinta aún peor. Mientras tanto, se dedican a hacer conjeturas sobre el próximo verano, sobre sus intereses en traer a Carmelo Anthony y a King James. Pero hasta que eso suceda, si es que sucede, los Lakers tienen una temporada por delante que se plantea difícil.

Mientras que los “pobres” van hacia arriba, los “ricos” van hacia abajo. Los Clippers tienen un bloque sólido que le puede durar varias campañas gracias a las renovaciones de sus dos grandes estrellas. Sin embargo los Lakers van a tener que confiar en atraer el próximo verano a los mejores agentes libres para poder volver al máximo nivel. De momento, la próxima temporada puede cambiar la tradición histórica y ver a los Clippers en el escalón en el que han estado los Lakers estos últimos y años y a los de D’Antoni un paso por abajo.

Suceda después lo que suceda, lo que está claro, es que Los Ángeles, ya no es una ciudad dominada por los colores púrpura y amarillo.


Brooklyn: a conquistar la Gran Manzana

 


Los Knicks son una de las franquicias más legendarias de la NBA. Desde su fundación en 1946 han acumulado dos anillos y ocho Títulos de Conferencia. El Madison ha visto mucho baloncesto y del bueno. No saben lo que es tener un rival en su misma ciudad, excepto la temporada 76/77 en la que concurrió con los New York Nets.

Cuando Mijaíl Prójorov se hizo con los Nets en 2010, llegaba con la intención de hacer un equipo campeón. No fue en sus primeras campañas, pero el traslado de la franquicia a Brooklyn ha sido el empujón que el multimillonario ruso necesitaba para hacer un equipo que pelee por el anillo.
Con las llegadas de Pierce y Garnett, el quinteto titular de los de Brooklyn asusta. Han diseñado un equipo a base de talonario con un solo propósito, ganar el anillo. Y aunque la edad que tienen sus dos flamantes fichajes es alta como para pensar en un proyecto a largo plazo, esta próxima temporada sí está en las quinielas que los Nets acaben delante de los Knicks. Algo que hasta ahora era desconocido, algo que nunca se había llegado a plantear en el Madison… ¿qué pasaría si un nuevo equipo se instala en la capital del mundo e intenta arrebatar el dominio a los knickerbockers?

Cierto es que el equipo liderado por Melo no ha bajado la calidad con respecto a las últimas temporadas (cosa que sí ha sucedido a los Lakers), es más, la llegada de Metta World Peace y Bargnani suma calidad a los, hasta ahora, reyes de Nueva York. Pero aun así, su plantel se queda por debajo del de sus vecinos. Al menos sin Stoudemire a su máximo nivel.

¿Listos para ver una bella batalla por el dominio de la mayor ciudad de Estados Unidos?