Esta semana Stan Van Gundy, coach de Detroit Pistons, se vió involucrado en una gran racha de siete victorias consecutivas que dejan a su equipo con posibilidades de pelear incluso por los playoffs (por supuesto que entre Detroit y el octavo lugar hay muchos equipos también). Esta gran racha cuenta inclusive con una victoria ante los campeones defensores, San Antonio Spurs, a quienes derrotaron en un agónico final. ¿Cómo hizo Stan Van Gundy para impedir que los Spurs anotaran sobre la chicharra? Fácil, “formen un puto muro” le dijo a sus dirigidos.
Con 0.01 segundos en el reloj, no había estrategia que valga. La única misión en la última jugada para los Pistons era aguantar como espartanos formando un muro, un bloque, lo que sea para que ningún texano se acercara al aro. Al diablo con las jugadas preparadas, las marcas en zona, doble marcaje sobre Manu: “we just form a fucking wall” fueron las palabras de Van Gundy. Hay veces en los que los entrenadores recurren a medidas desesperadas, poco ortodoxas para encaminar al equipo. Aquí algunas de las maniobras más extrañas vistas recientemente en la cancha.
Jason Kidd: “Hit me”
En su primer año como coach, Jason Kidd mostró las mañas de un veterano. Abajo en el marcador por dos puntos, ocho segundos para el final del partido y sin tiempos muertos le pidió a uno de sus jugadores que lo empuje para “accidentalmente” volcar su bebida en el suelo e interrumpir el juego para hablar con sus jugadores mientras limpiaban el piso. Una suerte de extra time out. A raíz de esta jugada, Jeff Van Gundy en sus comentarios para la televisión felicitó a Kidd y dijo que él hubiera hecho lo mismo. “Hasta me cortaría el cuello con una navaja si eso me garantizara un tiempo muerto extra” dijo Jeff.
Derek Fisher reemplaza a todo el equipo
Los Knicks parecían no tener ganas de jugar la noche que enfrentaron a los Dallas Mavericks hace unas semanas. La defensa no existía, se los notaba lentos. La decisión de Fisher fue mandarle un mensaje a los titulares: Si no quieren jugar, tengo a 5 otros tipos aquí que cobran menos que ustedes y tienen más ganas, y así, en la mitad del primer cuarto con su equipo perdiendo ya por una gran diferencia, Fisher sentó a los cinco titulares de una sola vez. El equipo entero fue sustituido. Esta medida desesperada fue para despertar a los jugadores, pero tal vez diga mucho sobre cómo su técnico prepara al equipo para los partidos.
Gregg Popovich queda sin palabras
Pop no dudó un segundo, apenas comenzado el juego ante los Grizzlies vio que algo andaba mal en el equipo y llamó a un mini timeout. ¿Les recordó alguna jugada preparada? ¿Una nueva estrategia para romper la defensa de Memphis? ¿Reasignó alguna marca? No. Solamente miró a sus jugadores durante veinte segundos y luego los mandó devuelta a jugar.
Bob Thate aconseja… al equipo contrario
Esta no es una medida desesperada pero sí responde a que hay veces en que los entrenadores no pueden ayudar a sus equipos de la manera convencional. Bob Thate, entrenador de tiros de L.A. Clippers , se reencuentra con un ex dirigido suyo, Jason Kidd (todavía jugador de NY Knicks por ese entonces), antes del partido pero no conforme con un saludo cariñoso antes del precalentamiento, Bob decide aconsejar una vez más a Kidd, lo ayuda a mejorar su tiro. Si Thate se hubiera concentrado en enseñarle lo mismo pero a sus propios jugadores quizás hubieran tenido la misma suerte que Kidd en el juego.