Tras haberse disputado ya cuatro jornadas de competición y con uno de los presupuestos más bajos de la categoría, los conjuntos canarios han demostrado su buen hacer en los despachos con la perfecta combinación entre incorporaciones y sostenimiento del grupo y su aún mejor rendimiento sobre el parqué para convertirse en dos de los equipos más destacados de la Liga Endesa.
Si cualquiera se guiase a comienzos de la pretemporada por el presupuesto de los equipos, los patrocinadores o los nombres más destacados en las tablas de fichajes, con total seguridad, no apostaría ni por el C.B. Canarias ni el Herbalife Gran Canaria. Sin embargo, si se tiene en cuenta la espectacular trayectoria de ambos conjuntos en campañas anteriores, el rendimiento de las plantillas, y cómo jugadores que venían a las islas como total desconocidos terminan fichando por equipos de primer nivel en el panorama europeo, tendríamos que revisar dos veces las apuestas.
El caso del Herbalife puede que sea menos destacado. No por falta de méritos o de un juego que hace vibrar a cualquiera que tenga la oportunidad de verles jugar, si no por lo acostumbrados (mal acostumbrados) que tiene a los aficionados en los últimos años. Y es que el equipo de Las Palmas, a pesar de tener año tras año problemas económicos que les lleve incluso a tener que renunciar a jugar competiciones europeas (como la presente temporada) continúa disputando tanto la Copa del Rey como los Play-Offs y metiendo en problemas a todos aquellos equipos que visiten su feudo, el Centro Insular de Deportes.
La falta de patrocinadores y la incesante lucha por conseguirlos no ha hecho que la faceta deportiva se vea mermada. Han seguido trabajando y de la mano de Pedro Martínez en el banquillo y Berdi Pérez en los despachos han continuado haciendo equipos ganadores, fichando a precios de ganga y consiguiendo de esos fichajes unos rendimientos que pocos podrían imaginar para conseguir batir sus propios récord al llegar, la temporada pasa, a las semifinales, tanto de la Liga Endesa como de la Copa del Rey. Han conseguido seducir a jugadores como Nacho Martín (MVP de la pasada temporada que contaba con ofertas de equipos con mayores objetivos) y han hecho que en los últimos años jugadores desconocidos como Toolson, Carroll, Savané, McDonald, Freeland, Xavi Rey o English se convirtieran en auténticas estrellas del panorama nacional.
El caso del C.B. Canarias es, si cabe, aún más sorprendente. Ha conseguido plantar cara en las dos temporadas consecutivas que lleva en la Liga Endesa y, todo ello, manteniendo el bloque que les llevó a dominar la LEB Oro los años anteriores.
La pasada campaña su inicio no fue ni el esperado ni el más halagüeño en sus aspiraciones por mantener la categoría. Los resultados y, seguramente, la falta de una adaptación rápida y sencilla al primer nivel de competición, les hizo tener un primer balance de 0-6 en contra. Sin embargo, aunque lo fácil hubiera sido dejarse llevar hasta el precipicio, el equipo reaccionó y acabó peleando por los puestos de acceso a Play Offs.
En este caso el mérito radica en saber administrar bien los recursos y apostar por un bloque que ha dado grandes tardes de baloncesto y que, por qué no, también podía ser capaz de hacerlo en ACB. En la presente campaña tan solo han hecho dos incorporaciones (tres si contamos la llegada de Diego Fajardo para sustituir al recién incorporado y lesionado Lampropoulos), apostando por mantener el conjunto que les dio tan buenas sensaciones en la 2012/2013, con jugadores de primerísimo nivel como Richiotti, Saul Blanco o Sekulic. Y vaya si lo han hecho; en las tres primeras jornadas hicieron pleno de victorias con un juego más que vistoso, con buenas defensas y grandes y rápidas transiciones en ataque que tan solo puedo parar, precisamente, el otro equipo insular en la cuarta jornada.
Ambos equipos canarios son el mejor de los ejemplos de que no tienes por qué tener los mayores presupuestos, los nombres más sonados ni los patrocinadores más comerciales para hacer bien las cosas. Si hay ganas, trabajo e ilusión todo es posible en el baloncesto y tanto el Herbalife Gran Canaria como el C.B. Canarias, van sobrados de todas esas cualidades a las que, sin duda alguna, se les suman la calidad de las plantillas y unas aficiones envidiables que guían, partido tras partido a sus equipos hasta la victoria.
Dos equipos humildes capaces de hacer cosas enormes.
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